Personajes

Diario de un Viajero (Día 4) Relax para recuperar fuerzas

El comienzo de este Camino de Santiago ha asido intenso, en el trayecto, las emociones vividas, el propio Camino, y esa experiencia que hay que vivir para poder entender en su máxima extensión. De ahí, que hayamos tomado un pequeño respiro para recobrar fuerzas. Tras descansar como hacía tiempo que no hacíamos, por el cansancio acumulado, nos levantamos con fuerzas renovadas.

Comenzamos la jornada en la Iglesia del pueblo; tras la misa, agradable paseo de relax por los mejores rincones de la villa aprovechando de paso para hacer alguna compras en el mercado para preparar el almuerzo y empaparnos del encanto de las gentes del pueblo.

Nos encargamos de hacer la comida en el albergue, un riquísimo guiso que aprendimos de nuestra querida abuela denominado ‘Papas Viudas’. Rato en el almuerzo para la charla, las risas con otros peregrinos que iban llegando escalonadamente para sumarse a la mesa y degustar como diría Arguiñano un manjar «rico, rico».

Tras la obligada siesta y un nuevo paseo relajado por la tarde, completamos esta jornada de descanso no sin antes repasar nuestra ruta de mañana.

Por MANÉ PAREDES by Salteras Actualidad

mane-paredes-camino-santiago-1 mane-paredes-camino-santiago-2 mane-paredes-camino-santiago-3 mane-paredes-camino-santiago-4 mane-paredes-camino-santiago-5 mane-paredes-camino-santiago-6

noticia anterior

Diario de un Viajero (Día 3) De Grados a Salas, ruta complicada

siguiente noticia

Diario de un Viajero (Día 5) De Salas a Tineo

Sin comentarios

Deja tu mensaje

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *